Vejez

  • Jeffrey de León
  • Nov-01-2010

La meta de agradar al Señor…

“Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria; no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas. Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos. Y por esto también gemimos, deseando ser revestidos de aquella nuestra habitación celestial; pues así seremos hallados vestidos, y no desnudos. Porque asimismo los que estamos en este tabernáculo gemimos con angustia; porque no quisiéramos ser desnudados, sino revestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida. Más el que nos hizo para esto mismo es Dios, quien nos ha dado las arras del Espíritu. Así que vivimos confiados siempre, y sabiendo que entre tanto que estamos en el cuerpo, estamos ausentes del Señor (porque por fe andamos, no por vista); pero confiamos, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes al Señor. Por tanto procuramos también, o ausentes o presentes, serle agradables. Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo” (2 Corintios 4:17–5:10) “

“La vida es más preciosa que nunca, y el tiempo es mi más valiosa posesión. No tengo tiempo para criticar, o para ser negativa, desconsiderada o aburrida. No pienso en términos de “un tiempo límite”. Mi meta es permanecer en la voluntad de Dios; en sus manos y en su tiempo,porque el futuro es del Señor”.

Ruth Ray Hunt. Edad: 74 años

Sentimientos negativos en la vejez

Soledad

Rechazo

Abandono

Impotencia

Inutilidad

Temor

Desesperanza

Actitudes negativas de la vejez

Crítica

Pesimismo

Dogmatismo

Negatividad

Amargura

Terquedad

Ingratitud

“Mi aliento se agota, se acortan mis días, y me está preparado el sepulcro”.(Job 17:1)

Un vistazo a las pérdidas

La vejez implica muchas pérdidas, y si no se tiene un equilibrio entre el presente y lo que “ya fue”, no habrá crecimiento espiritual. La madurez no puede florecer en el terreno de un luto prolongado o de la depresión. Considere los árboles, ellos no lloran por la pérdida de una hoja o una rama, pues esta es la manera en que Dios los renueva y lleva a mayores alturas.

Pérdida de la salud

Pérdida de ingresos

Pérdida del hogar

Pérdida de la independencia

Pérdida de los sueños

Pérdida de seres queridos

Pérdida del control

Pérdida de la esperanza

Versículo clave para memorizar

“Y hasta la vejez yo mismo, y hasta las canas os soportaré yo; yo hice, yo llevaré, yo soportaré y guardaré”. (Isaías 46:4)

Pasaje clave para leer y meditar

2 Corintios 4:17–5:10

Cómo envejecer con gracia

Acentúe lo positivo—Su manera de pensar determina sus sentimientos. En la medida en que comience a vigilar los pensamientos de su mente, sus actitudes hacia las circunstancias empezarán a cambiar. (Filipenses 4:8)

Cuide de su salud—“La práctica hace al maestro”, pero la buena salud depende por lo general del desarrollo de nuevos hábitos que reducen el riesgo de adquirir las enfermedades asociadas con la vejez. (3 Juan 2)

Tenga una dieta balanceada.

Hágase exámenes médicos de rutina.

Haga ejercicio con regularidad.

Inicie un programa de participación—El propósito de Dios para usted es que se involucre en la vida de los demás. El mundo que le rodea está lleno de gente necesitada de alguien que se interese por ellos de manera sincera. (2 Corintios 9:6)

Visite a los desprotegidos y abandonados.

Esté disponible para los demás con su tiempo y apoyo.

Aprecie las rosas—Permítase “bajar el ritmo de trabajo y olfatee las flores” (1 Corintios 14:33)

Crezca en la gracia—Esto significa que está creciendo en el reconocimiento de la presencia constante de Cristo en usted. (2 Pedro 3:18)

Cómo andar en sabiduría

Las reservas que se hacen para el invierno contienen riquezas incalculables—Ahora usted tiene una mayor comprensión de los verdaderos valores de la vida. (Proverbios 15:31)

El invierno hace profundizar las raíces—Ahora ama más profundamente, y sus rela­ciones interpersonales son más significativas. (Jeremías 17:8)

El invierno abre la puerta a vida nueva—Ahora usted es un ejemplo de cómo vivir una vida piadosa. (Tito 2:7–8)

El invierno sabe que está aquí por una corta temporada—Ahora empieza usted a soltar las cosas de este mundo. (Filipenses 3:20)

El invierno escucha el llamado a la vida eterna—Ahora comienza a descansar en el conocimiento de la vida eterna con Cristo. (Juan 10:27–28)

El invierno reposa en su esperanza del futuro—Ya no le teme a la muerte. (1 Corintios 15:55)

“¿ Es importante el afecto para un adulto mayor?”

Todo mundo necesita abrazos, besos y contacto físico.

“Saludaos unos a otros con ósculo de amor”.(1 Pedro 5:14)

“¿ Debo insistir en que los adultos mayores salgan de sus casas?”

Respete su deseo de quedarse en casa a menos que sea de urgente necesidad.

“Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra”. (Efesios 6:2–3)

“¿ Debo dirigir las decisiones de mis amados adultos mayores?”

Permítales tomar sus propias decisiones el mayor tiempo posible.

“Delante de las canas te levantarás, y honrarás el rostro del anciano, y de tu Dios tendrás temor. Yo Jehová”.(Levítico 19:32)

“¿ Qué debo hacer para prepararlos para el futuro?”

Adquiera un seguro de vida y servicios legales con anticipación.

“Los pensamientos son frustrados donde no hay consejo; mas en la multitud de los consejeros se afirman”. (Proverbios 15:22)

Temas relacionados con la vejez

Cuidando a otros:

No es prisión, sino privilegio

Las enfermedades crónicas:

Cómo tener la paz de Dios en medio del dolor

La eutanasia:

El mito de matar por misericordia

La soledad:

Cómo estar solo sin sentir soledad

La crisis de la media vida:

Una encrucijada del camino

La viudez:

Sabiduría para vivir solos

Si desea más información, llame al 1-800-488-HOPE (4673) o visite www.hopefortheheart.orgwww.esperanzaparaelcorazon.org

Nuestros representantes le atenderán con gusto.

Todas las citas están tomadas de la Versión Reina Valera Revisión 1960. © 1988 Sociedades Bíblicas Unidas Todos los derechos reservados.

© 2006 HOPE FOR THE HEART• • • • • •

Dejar un comentario

Su correo no será publicado

*Información requerida

Los comentarios emitidos pueden estar sujetos a aprobación antes de aparecer.