En los últimos años el tenis femenil internacional se ha vuelto un deporte muy popular. Pero la historia personal de algunas jugadoras revelan una característica triste pero demasiado común: Muchas jóvenes, algunas incluso adolescentes, están bajo la presión de sus padres dominantes que les exigen sobresalir en el tenis.
Las deportistas Jelena Dorik de Yugoslavia, Mary Pierce de Francia, Steffi Graf de Alemania y las norteamericanas Venus y Serena Williams saben lo que es vivir con la presión de los padres, que en todos los casos han sido abusivos, mentirosos y dominantes al punto de cometer actos criminales en la búsqueda de la perfección de sus hijas. Esas jovencitas crecieron creyendo que si fallaban, perderían el amor de sus padres.1
¿Alguna vez se ha sentido así?
“Él [Dios] dijo: No te desampararé, ni te dejaré”. (Hebreos 13:5)
“Dios nos llama a buscar la excelencia, pero no a ser prisioneros del perfeccionismo.”
—June Hunt
La característica esencial del perfeccionismo es que es una conducta compulsiva que resulta en la necesidad insegura de “ir más allá de la línea del deber”.
Desea controlar el ambiente, las situaciones y a los demás3
Se opone a la crítica y la corrección
Maximiza lo irrelevante
Pospone las cosas
Subestima el tiempo necesario para concluir tareas
Falta de gozo y creatividad
Sacrifica las relaciones por los proyectos
Imagina el rechazo de otros
Vacila al tomar decisiones
Expresa intolerancia hacia otros
Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte”. (Romanos 8:1-2)
Sustituya los patrones de las ideas perfeccionistas con el poder liberador de la verdad de Dios.
Mensaje #1—“No siempre tengo que hacer todo bien, nadie es perfecto”. (Romanos 3:23)
Mensaje #2—“Nunca debo tener miedo de perder el amor de Dios por algo que pudiera hacer o dejar de hacer”. (Romanos 8:38–39)
Mensaje #3—“Puedo dejar de compararme con otros debido a que Dios me diseñó de manera exclusiva, soy una persona singular”. (Salmos 139:14)
Mensaje #4—“Puedo aceptar otros retos con toda confianza. No estoy limitado a hacer sólo aquellas cosas que me salen bien”. (Proverbios 3:26)
Mensaje #5—“Soy libre para disfrutar mi vida. Dios no quiere que sea esclavo de una serie de reglas y reglamentos”. (Juan 8:36)
“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos;el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer”. (Juan 15:5)
Evalúe su extremismo. (Lucas 10:38–42)
Espere que haya incomodidad. (1 Pedro 4:12)
Deje de compararse. (2 Corintios 10:12)
Elimine las expectativas irreales. (Lucas 6:35)
Aprenda a reírse de sus propios errores. (Proverbios 15:15; 17:22)
Identifique su impaciencia con los demás. (1 Tesalonicenses 5:14)
Aprenda a decir no. (1 Corintios 6:12)
Crezca en la gracia. (2 Pedro 3:18)
Libérese de las reglas. (Gálatas 3:3)
Reciba la aceptación total de Dios. (Romanos 15:7)
Elimine la auto condenación. (Romanos 8:1)
Cambie sus esfuerzos por la dependencia del poder de Cristo. (2 Corintios 12:9)
“Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús”. (Romanos 8:1)
Identifique sus tendencias. (Salmos 139:23–24)
Pida al Señor que le muestre sus propios ideales y exigencias.
Identifique las áreas del perfeccionismo.4 (1 Pedro 5:7)
¿Es necesario el orden para que usted pueda descansar?
¿Es la puntualidad una exigencia?
Enfrente sus sentimientos.5 (Salmos 25:17)
Permítase sentir el dolor de su pasado.
Comprométase a cambiar. (Hebreos 12:1)
Elimine las expectativas irreales sobre usted y los demás.
Controle su mente. (Romanos 12:2)
Ore diariamente para que Dios intervenga y le ayude a dominar sus pensamientos.
Pierda su vida. (2 Pedro 1:3–4)
Renuncie a sus exigencias de que las cosas sean como usted desea.
Crezca en la gracia. (Gálatas 5:22–23)
Permita al Espíritu de Cristo que vive en usted que produzca su fruto a través de usted.
Los cristianos deben tener como meta la madurez y la plenitud.
Error: “Se espera que los cristianos sean perfectos, sin fallas ni errores”.
Verdad: Se espera que los cristianos sean perfectos, maduros y completos.
“Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto”.(Mateo 5:48)
Los perfeccionistas se sienten derrotados si se descubre que se han equivocado de alguna manera. A los cristianos se les ordena levantarse por encima de la inmadurez y ser excelentes en la madurez.
“Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales,sin que os falte cosa alguna”.(Santiago 1:4)
No. Cuando es necesario hacer cambios, los perfeccionistas son menos flexibles para iniciar nuevas ideas o procedimientos. Sin importar cuál sea nuestra ocupación, debemos hacer todo como para el Señor.
“Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres”.(Colosenses 3:23)
El perdón:
Cómo liberar a otros
La crítica:
Anime, no critique
La culpa:
Cómo vivir libre de remordimiento
Hábitos:
Cómo practicar el dominio propio
Su identidad:
¿Sabe usted quién es en realidad?
Adicción al trabajo:
La senda al colapso nervioso
Si desea más información, llame al 1-800-488-HOPE (4673) o visite www.hopefortheheart.org
www.esperanzaparaelcorazon.org
Nuestros representantes le atenderán con gusto
ESPERANZA PARA EL CORAZÓN
P.O. Box 7, Dallas, TX 75221
1. Alex Duval Smith, Crossing the line, “Más allá del límite”, en Independent, The (London), Agosto 7, 2003, http://www.findarticles.com/p/articles/mi_qn4158/is_20030807/ai_n12706864 (accesado Diciembre 4, 2006).
2. Para esta sección véase Miriam Adderholdt y Jan Goldberg, Perfectionism: What’s Bad About Being Too Good? “Perfeccionismo: Lo malo de ser demasiado bueno”, ed. rev. y actualizada (Minneapolis, MN: Free Spirit, 1999), 22–26, 30, 44–45, 52, 61.
3. Véase David A. Stoop, Living with a Perfectionist “Viviendo con un perfeccionista” (Nashville: Oliver-Nelson, 1987), 36.
4. Stoop, Living with a Perfectionist, “Viviendo con un perfeccionista”, 26–28.
5. Véase Adderholdt y Goldberg, Perfectionism, “Perfeccionismo”, 91; Stoop, Living with a Perfectionist, “Viviendo con un perfeccionista”, 112–21.
Todas las citas están tomadas de la Versión Reina Valera Revisión 1960. © 1988 Sociedades Bíblicas Unidas Todos los derechos reservados. © 2006 Hope For The Heart• • • • • •
muy buen articulo
Dejar un comentario